El valor del esfuerzo es análogo a lo que la geometría y la simetría le aportan a las cosas. Platón se había dado cuenta que la geometría, por ejemplo el hexágono, le aporta fuerza al hombre, como lo hace el esfuerzo, y que hay una relación entre estos “dos mundos”. Hay que relacionar a la Goethe «lo más inmediato solo con lo más inmediato», pero a la vez, es verdad que lo intemporal es preeminente sobre lo temporal. Hay cosas a las que el tiempo no puede hincarle el diente, y son tan reales como lo efímero y circunstancial.